MIS
HIJOS
Como todas las flores y su zumo cristalino,
mis hijos son sueños, esperanza y realidad,
inefables milagros de un amor...
de un jardín sonriente hecho flor.
Son mis tres encantadores hijos
la lámpara diaria encendida,
los más hermosos sentimientos fijos,
mi juventud y mi devoción querida.
En mis brazos los estreché
como peplos de seda pura,
y quise diseñar su cliché
con sed de amor y ternura.
Mis hijos me enternecen
cuando los miro a sus ojos,
en mi corazón florece
la esencia de mis antojos.
He persistido en pretéritas normas
que confirman logros, el ser y existir;
¡mis hijos se colman de metas y formas
que vienen de lejos y dan porvenir!.
¡Bien sabes, Oh, Dios Poderoso!
cuánto te rezo y pido por ellos,
son mi historia, mis lindos colosos
¡fulgor de mi vida que expiden destellos!
¡Son mis tres hijos candores,
mi más preciado y hermoso sueño....
Amor con esencia de las flores,
son equilibrio, plenitud y ensueño.!!
Crisálida Porras. Diciembre 2003.
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